OBJETIVOS

OBJETIVOS DEL CURSO COFRADE

UNOS OBJETIVOS AMBICIOSOS

Al menos sobre el papel, a la hora de declarar nuestras intenciones debemos ser ambiciosos. No se trata simplemente de que nuestros cofrades conozcan lo que tienen que hacer, como si nos conformáramos con que repitan lo que han aprendido, lo que se les ha transmitido.

Estamos en una sociedad cambiante, que exige de cada uno y de la Iglesia en su conjunto, respuestas creativas. Las cofradías, basadas en una tradición que se transmite casi oralmente, y que las determina y a veces las encorseta, no por ser más fieles tienen que ser menos capaces de adaptarse a las nuevas circunstancias. Es hoy -y mañana- donde a nuestros cofrades les corresponde dar testimonio de su esperanza.

Por eso es deseable que sean capaces de evaluar cada momento histórico que les corresponde vivir, de juzgarlo a la luz de la fe y de su propia tradición, y de recrear en ese tiempo su ser de hermandad. En definitiva: el horizonte debería ser capacitar a los hermanos para una tarea de "liderazgo" en el conjunto de las hermandad, de la Iglesia y de la sociedad.

Parece un proyecto original, pero eso es lo que fueron en su momento iniciativas como los famosos Cursillos de Cristiandad: el intento de crear una levadura capaz de hacer fermentar la masa, capaz de dar sustancia y sabor al mundo que les toque vivir.